TIEMPOS FINALES Y LOS
CÓDIGOS DE LA BIBLIA
(Parte II)
Por Wally Santos
El Tiempo Final según la Biblia
Durante mucho tiempo se estuvo hablando en diferentes medios acerca del tema de las profecías Mayas y el “Fin del mundo” en el año 2012. Mucha gente se preguntaba, Realmente… ¿qué iría a pasar el 21 de Diciembre del 2012? ¿Qué ambiente habría la mañana del 22 de Diciembre?, etc.
Sólo con el hecho de establecer una fecha, ya es motivo de incertidumbre. Al revisar la historia, vemos que muchos pseudo-profetas “predijeron” muchas catástrofes. Algunos dijeron que el mesías ya había venido en su manifestación pública (como Rey) y otros que la llegada del año 2000 sería un caos mundial. No cabe duda que en la humanidad siempre hay personajes o entidades que buscan razones para mantener la atención (o el temor) de las sociedades. Recuerdo que hace un par de años, comenzó a publicarse algunos datos interesantes acerca de la cosmovisión Maya para el año 2012. Llevé esa publicación al salón de mis estudiantes (de Ciencias de la Comunicación) porque yo quería ver la reacción de ellos con temas de esta naturaleza. Las reacciones fueron las esperadas, comenzaron a preguntar si realmente ocurriría lo que allí decía. El texto de la revista hablaba de un cambio de “era”, de algunas repercusiones “apocalípticas”, y la llegada del “fin del mundo”.
Desde ese entonces observé que el tema de las profecías mayas iba cobrando más y más interés, y despertaron todo tipo de pasiones en las personas. Como que los hace pensar acerca del futuro y su mayor preocupación es su seguridad personal, y la de su familia. Algunos de mis estudiantes se me acercaron aparte y me confesaron que esas cosas, les daba mucho miedo. Me pidieron que les explicara algo del “Fin del mundo”. Pues bien, les hablé algo sobre Apocalipsis y el plan de Dios para nosotros, los seres humanos. Lo curioso es que me preguntaron si yo tenía miedo acerca de esto (2012), y por supuesto, les dije que yo no tenía miedo.
Ellos no entendían el por qué yo no tenía miedo, les expliqué que el que está en Cristo esos temores se van, y que por la fe, tenemos promesas de vida eterna. Es más, si Dios disponía llevarme de este mundo, yo ya sabía a dónde iría, a la casa de mi Padre. No está demás decir, que algunos de mis alumnos se sintieron muy inquietos por varios días y algunos no podían dormir a causa del miedo. Y así hay mucha gente en el mundo, con mucho temor por los “eventos” que vendrían en el 2012. Aunque la Biblia sí habla de Juicios que vendrán, no porque los mayas lo hayan dicho, sino porque está escrito en Biblia.
Una de las promesas más preciosas que encontramos en la Biblia, está en Juan 10:27-29: “Mis ovejas oyen mi voz; yo las conozco y ellas me siguen. Yo les doy vida eterna, y nunca perecerán, ni nadie podrá arrebatármelas de la mano. Mi Padre, que me las ha dado, es más grande que todos; y de la mano del Padre nadie las puede arrebatar.”
Así que en Cristo Jesús estamos seguros que nada nos apartará de Él, y nuestra eternidad ya empezó cuando recibimos a Cristo en nuestro corazón. Al estar en Cristo, tenemos la seguridad que Él nos guarda de peligros, pero si así no fuera, siempre hay propósitos de parte de Dios para nuestra vida. El apóstol Pablo predicó en muchos lugares, pero también sufrió situaciones adversas por causa del Evangelio, por ejemplo, en 1 Tes. 3:7 dice: “En ello, hermanos, recibimos consolación de vosotros en toda NUESTRA NECESIDAD Y AFLICCIÓN por causa de vuestra fe”. Y en Hechos 14:19 (NVI) dice: “En eso llegaron de Antioquía y de Iconio unos judíos que hicieron cambiar de parecer a la multitud. APEDREARON A PABLO y lo ARRASTRARON fuera de la ciudad, CREYENDO QUE ESTABA MUERTO.”; Sin embargo, en otras porciones de la Biblia observamos que Dios libró a Pablo de otros peligros.
Aunque el tema que hoy nos aborda no es sobre las tribulaciones, es importante tener en nuestra mente que, pase lo que pase, nada nos apartará del amor de Dios. En nuestra caminata cristiana enfrentaremos a muchos enemigos (de carne y hueso, y también espirituales), pero también Dios nos librará de otros y veremos el poder de Dios manifestándose.
Conforme nos acercábamos al año 2012, más y más veíamos en los medios de comunicación, temas referente a ese año que se acercaba. Nos hablaban de las profecías Mayas, las profecías de Nostradamus, las profecías de Juan XXIII y de un gran número de excéntricos que lo único que querían era llevar agua a su molino o asustar a la gente.
El “fin del mundo”, como muchos quieren entenderlo, aún no vendrá. En el Libro de Mateo 24:4-6 dice: “Respondiendo Jesús, les dijo: Mirad que nadie os engañe. Porque muchos vendrán en mi nombre, diciendo: "Yo soy el Cristo", y engañarán a muchos. Y habréis de oír de guerras y rumores de guerras. ¡Cuidado! No os alarméis, porque es necesario que todo esto suceda; PERO TODAVÍA NO ES EL FIN.”
Lo que sí es cierto es que nos encontramos en los “tiempos del fin”, pero no en los días del “Fin de Mundo”, como muchos dicen para infundir temor en la gente. La Biblia claramente expresa que nos encontramos en el principio de los dolores del parto, es decir, la Biblia compara estos tiempos como los dolores de parto en una mujer. Cuando una mujer está esperando un bebé, y le empiezan los dolores de parto, no significa que inmediatamente nace el niño, sino que empieza el proceso y este “pronto nacerá”, el ritmo y la frecuencia de los dolores indicarán el momento preciso del nacimiento. En los siguientes versos, Mateo 24:7-8 dice: “Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino, y habrá hambres, pestes y temblores de tierra aquí y allá. Pero todo esto es EL PRINCIPIO DE LOS DOLORES DE PARTO.” (Ver. Aramea)
Personalmente creo que ya estamos en la etapa de “El principio de los dolores de parto”. Muchas de las profecías que Dios le dio a sus verdaderos profetas (Jeremías, Ezequiel, Isaías, Daniel, etc.) ya se han cumplido y continuarán cumpliéndose. El pastor que durante 18 años pastoreó mi vida, el Dr. Othoniel Ríos Paredes (quien ya está con el Señor), nos enseñó muchos temas referente a los tiempos finales y él siempre nos decía (con las referencias bíblicas respectivas) que los tiempos del fin ya los estábamos viviendo. Y todo ese caudal de comprensión bíblica traté de atesorarlo en mi corazón.
Cada día que pasa, surgen nuevas doctrinas y filosofías hablando sobre temas espirituales y apocalípticos. Aunque este término “apocalíptico” lo están mal utilizando en los medios, pues ellos hacen referencia a este término como sinónimo de catástrofe, caos, muerte, aniquilación, etc. Cuando el verdadero sentido de esa palabra es “Revelación”, Apocalipsis es el “Libro de las Revelaciones”. Es decir, Dios dejó allí lo que habría de venir para la humanidad y para los hijos de Dios. Apocalipsis, según el diccionario Strong´s dice que: "apokalupto" (ref. 601) Puede significar: Revelar, abrir lo que ha sido cubierto (con un velo por ejemplo), poner al desnudo, poner de manifiesto o revelar lo que antes era desconocido. Así que en este bello Libro encontramos la “Revelación” de cómo serán los tiempos finales.
¿Cómo saber que ya estamos en los Tiempos Finales?
En Libro de Daniel, cap. 12, encontramos una descripción del tiempo del fin; pero específicamente en el verso 4 leemos: (NVI) “Tú, Daniel, guarda estas cosas en secreto y sella el libro hasta la hora final, pues muchos andarán de un lado a otro en busca de cualquier conocimiento.”
Y la versión RV60 dice: “Pero tú, Daniel, cierra las palabras y sella el libro hasta el tiempo del fin. Muchos correrán de aquí para allá, y la ciencia se aumentará”.
Quise incluir el versículo 4 de estas 2 versiones de la Biblia, pues nos abren un panorama muy amplio para que comprendamos de una mejor forma este pasaje. Dios le “revela” una serie de acontecimientos del tiempo final al profeta Daniel y este verso 4 es la clave de cuándo se cumpliría. En primer lugar dice que esta profecía estaría sellada (cerrada, oculta, sin entenderse) hasta el tiempo del fin.
La palabra hebrea que se emplea para “TIEMPO” es: `eth (6256) y significa precisamente: Tiempo (de un evento), el tiempo (como lo usamos frecuentemente, por ejemplo refiriéndose a la hora), experiencias (del momento de vivir algo), ocurrencia (del verbo ocurrir) y ocasión.
Respecto a la palabra “FIN” en el hebreo se usa: qets (7093) y significa en dos aspectos: a) Fin (refiriéndose al tiempo) y, b) Fin (de espacio).
Y la palabra hebrea para “CIENCIA” es: da`ath (1847) que podría tener dos significados:
A) Conocimiento (en el sentido de conocimientos, ciencia, percepción o destreza adquirida).
B) En el sentido de Discernimiento, Comprensión, Sabiduría (o Cordura).
Ahora bien, basados en estas definiciones, y con la ayuda del Señor, podemos notar que la “comprensión” de esos eventos que le revelaron a Daniel sería para el “final de los tiempos” (era, ciclo, espacio), y no del “fin del Mundo” (destrucción) como lo indican los medios de comunicación. Pero… ¿a qué “tiempos” se refiere este “final”? Obviamente al momento contextual de todo lo que dice Mateo 24. Por supuesto, en este capítulo hay muchos “sub-eventos”, que no es la razón de ser de este artículo.
Lo que me llama la atención es que la versión NVI, da una “luz” muy interesante:
“pues muchos andarán de un lado a otro en busca de cualquier conocimiento.” Sólo por curiosidad ingrese a la RED y escriba “profecías 2012” y le aparecerán 2.310.000 (Dos millones 310 mil sitios aprox.) en donde Ud. puede encontrar información referente es esto. Claro está, que la mayor parte de esa información es de dudosa procedencia. ¿Por qué existen tantas fuentes de esta información? Porque muchos (miles o millones) van de un lado a otro queriendo saber más (conocimiento) del fin. Pero lo más triste, es que no acuden al único Libro que les puede dar la respuesta apropiada, LA BIBLIA (para adquirir Sabiduría). Quieren la “ciencia” del mundo, pero no la “sabiduría” de Dios.
No hay que olvidar que el “incremento de la ciencia”, también es parte de las señales del tiempo final. Es decir, estamos en el momento preciso en donde Dios revelará su Palabra a quienes lo busquen.
Ud. puede ver en Mateo 24 que allí se describen muchos eventos, pero quiero subrayar algo muy importante. En el Verso 14 (Ver. Aramea) dice: “Y este evangelio del reino será predicado en todo el mundo para testimonio de todas las naciones, y entonces vendrá el fin del tiempo fijado”.
Al aumentarse la ciencia en todas sus ramas, como señal del tiempo final, Dios nos está diciendo que este Evangelio será predicado a todas las naciones para testimonio de ellos, es decir que, no necesariamente “todas las naciones” se van a convertir al Señor, pero al menos habrán escuchado que hay un Dios Verdadero y un solo camino hacia Dios que se llama Jesucristo, y verán a los ministros del Señor respaldados por el poder del Espíritu Santo. Entonces, vendrá el fin del tiempo fijado.
Uno de esos avances tecnológicos, es el campo de la INFORMÁTICA. Vivimos en una era, que los comunicadores llamamos la “Era de la Información” o de las “Telecomunicaciones”. Esta “Era” ha sido gracias al invento y avances de la computación. Esta ciencia ha permitido el descubrimiento de muchas otras cosas en todos los campos de las otras ciencias. Gracias a esta tecnología (Informática), Dios le permitió a un grupo de científicos descubrir algo asombroso, los Códigos de la Biblia (de los cuales ya hablamos algo en en el artículo anterior).
Ha sido necesario exponer los 2 capítulos anteriores, para que a partir de ahora, podamos tener un mayor nivel de comprensión acerca de uno de los objetivos de Dios para estos tiempos que estamos viviendo, mostrarnos que Su palabra, es Su Palabra, La Biblia.
Ahora bien, en el siguiente artículo les mostraré algo de las muchas cosas que dicen los códigos bíblicos referente a ese año 2012, y una vez más veremos que la Palabra de Dios está vigente HOY.
Dios te siga bendiciendo.
(Continuará....)
(Continuará....)